Bienvenidos al Boletín de Datos de la Biblioteca de la Fundación Juan March: una carta trimestral debates, hallazgos y novedades sobre datos culturales para profesionales e interesados en el sector.
En este tercer número hablamos de archivos conversacionales e inteligencia artificial aplicada a la gestión cultural. Exploramos el caso de la NSFA australiana, la tecnología RAG y algunas reflexiones surgidas de una sesión reciente sobre tendencias en documentación y gestión de la información. También te contamos una buena noticia: nuestra biblioteca se suma a la Sección de Tecnología de la Información de la IFLA.
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¿Y si los archivos pudieran hablar? |
Las colecciones digitales no dejan de crecer, alimentadas por la continua incorporación de objetos digitales que bibliotecas, archivos e instituciones culturales publican en Internet. ¿Cómo podemos interactuar con ellas de manera más natural, intuitiva y accesible, sin contar con conocimientos técnicos o saber cómo ha sido catalogada la información? |
- De listas rígidas a respuestas fluidas. En esta charla, Keir Winesmith (NSFA) explica cómo han desarrollado un archivo conversacional que usa IA para navegar por más de 4 millones de elementos de forma tan natural como mantener una conversación. La clave para evitar alucinaciones es que usar la IA de forma estratégica y acotada: para transcripciones, reconocimiento facial o generación de entidades y siempre en el contexto de sus colecciones. Además, contrastan los resultados con quienes las conocen bien: “Lo realmente valioso es alinear lo que el sistema cree que es cierto con lo que los catalogadores y conservadores han dicho que es cierto”, reflexiona.
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- Respuestas con evidencia. Los sistemas RAG (Retrieval-Augmented Generation) van un paso más allá: en lugar de generar respuestas "de la nada", primero buscan en una base documental, recuperan fragmentos y luego formulan una respuesta basada exclusivamente en lo hallado. Usan una combinación de LLMs, bases vectoriales y librerías para la orquestación. Su promesa: respuestas claras, más precisas y trazables. Aunque su arquitectura es más técnica, su objetivo es el mismo: romper con la rigidez de la búsqueda tradicional.
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Dos hitos hicieron posible estas tecnologías: la aparición de Word2Vec en 2013, que transformó la manera en que las máquinas interpretan el lenguaje, representando las palabras como vectores capaces de reflejar similitudes y relaciones semánticas, y este artículo de 2017 que introdujo los Transformers, una arquitectura que revolucionó el procesamiento del lenguaje natural por su capacidad para entender el contexto con notable eficiencia. |
Luis Martínez Uribe, Concha Campos-Asensio y Víctor Villapalos durante la conversación sobre tendencias en documentación / Foto: Alfredo Casasola |
Una transformación a contrarreloj |
“Todo parece indicar que al final encontraremos otras vías para hacer nuestro trabajo con un valor añadido, pero no sabemos si tendremos tiempo para esa transformación antes de que la IA llegue y arrase”. |
Esta advertencia, lanzada el pasado 12 de mayo por Víctor Villapalos, director-gerente de SEDIC, durante esta sesión sobre las tendencias emergentes en documentación, resume una inquietud creciente: ¿Tendrán los profesionales de la información tiempo para reinventarse antes de que la inteligencia artificial imponga un nuevo paradigma? |
Villapalos y Concha Campos-Asensio, bibliotecaria del Hospital Universitario de Getafe, debatieron el choque entre la tradición documentalista, basada en procesos exhaustivos, y la aceleración tecnológica, que promete inmediatez y eficiencia.
Campos-Asensio subrayó la inversión institucional y rigor que requieren las revisiones sistemáticas, claves en la toma de decisiones; Villapalos destacó el impacto de sistemas agénticos, que no reemplazarán a los profesionales, pero sí muchas de sus tareas: búsquedas bibliográficas, análisis de datos e incluso atención clínica. |
Ambos coincidieron en la necesidad urgente de construir el futuro con criterios claros: |
- Fomentar una cultura sólida de ética profesional
- Diseñar auditorías para las herramientas de IA
- Garantizar la formación continua para evitar que aumenten las brechas de desigualdad
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Su conclusión fue que, ante el avance de la automatización, las bibliotecas pueden consolidarse como mediadoras críticas, garantes de acceso equitativo, integridad y ética de la información.
La automatización puede derivar en “sedentarismo cognitivo” –el término es de Paz Fernández– o sobrecarga laboral, pero también abre la puerta a repensar el sentido mismo del trabajo documental. Como resumió Campos-Asensio: |
“Los bibliotecarios estamos muy bien posicionados. Somos expertos en encontrar información con muy poco. Si lideramos el uso ético y responsable de la IA, nos va a dar mucha vida”. |
La Biblioteca se incorpora a la Sección de Tecnología de la IFLA |
Nuestro director y Data Scientist Luis Martínez-Uribe ha sido seleccionado como miembro del Standing Committee de la Sección de Tecnología de la Información de la IFLA, que impulsa las mejores prácticas tecnológicas en bibliotecas.
Desde este cargo, contribuirá a iniciativas globales centradas en el acceso equitativo, sostenibilidad tecnológica y desarrollo profesional. El comité también asesora técnicamente a otras secciones de la IFLA. Esta participación supone una oportunidad para proyectar la experiencia del DataLab de la Fundación Juan March en el ámbito internacional y contribuir activamente a los retos tecnológicos que enfrentan las bibliotecas del siglo XXI. |
Gracias por leer. ¡Hasta el próximo número! |
EL DATALAB
El Laboratorio de conocimiento/DataLab es una sección de la Biblioteca dedicada a proyectos de curación y analítica con los datos producidos en la propia Biblioteca y en el resto de la Fundación. En el Laboratorio se usan tecnologías y metodologías propias de la ciencia de datos, que permiten explorar formas nuevas de analizar y visualizar la información. |
Entrada libre y gratuita. La Biblioteca / Centro de Apoyo a la Investigación está abierta solo a los investigadores e interesados en la consulta y uso de sus fondos.
Coopera con otras bibliotecas como miembro de REBIUN y de otras asociaciones especializadas (AEDOM, SEDIC, SIBMAS).
Facilita el préstamo interbibliotecario de los fondos fechados a partir de 1950, excluyendo los materiales de archivo y bibliotecas personales. |
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