La memoria del teatro musical en España

Ensayos de teatro musical español

Ignacio Jassa Haro

El teatro musical es una manifestación de la cultura española que ha gozado de una extraordinaria vitalidad durante, al menos, los últimos cuatro siglos de nuestra historia. Integra esta longeva y fértil herencia creativa un variado espectro de manifestaciones que van desde lo operístico al teatro declamado sazonado con canciones, incluyendo realidades tradicionalmente entendidas como quintaesencia de lo indígena (zarzuela, tonadilla) y otras leídas históricamente como peligrosas contaminaciones de nuestra musa patria (ópera italiana, opereta, musicales). Nuestra aproximación a la memoria del teatro musical en España pretende dirigir una mirada holística a ese panorama tan amplio como variado de lo músico-teatral abarcando en nuestro barrido desde el barroco a nuestros días.

Cubierta de la partitura de la tonadilla a dúo   Los jardineros  de Luis Misón, 1761 (© Biblioteca Histórica Municipal de Madrid)
Cubierta de la partitura de la tonadilla a dúo Los jardineros de Luis Misón, 1761 (© Biblioteca Histórica Municipal de Madrid)

Nuestra reflexión y recorrido se van a dirigir hacia la memoria dejada por esa extraordinaria tradición. Pero la memoria se almacena de muchas formas. Existe, por ejemplo, una preciosa memoria viva, que no vamos a explorar aquí, transmitida de generación en generación, y que heredan, por ejemplo, intérpretes (de maestros a discípulos), públicos (de padres a hijos) o empresarios (de consolidadas compañías a noveles competidores). Esa memoria se plasma en una multiplicidad de realidades intangibles como escuelas interpretativas, repertorios asentados y demandados, circuitos comerciales, etc., y cuenta con procedimientos propios para su estudio. Nosotros, en cambio, prestaremos nuestra atención a otra parte de esa memoria, la que ha quedado fijada en soportes materiales, esto es, en documentos, conservados hasta nuestros días por una enorme diversidad de coleccionistas, desde particulares hasta instituciones de la memoria.

Los cuatro siglos en los que vamos a fijarnos (desde el XVII al XXI) pueden dividirse de forma un tanto simplificadora en dos grandes períodos históricos: el Antiguo Régimen y el nuevo orden que se instaura en España tímidamente tras la Guerra de la Independencia, y de forma más clara a partir del reinado de Isabel II. La producción de espectáculos músico-teatrales en cada uno de estos períodos tiene dos principales modelos de emprendimiento. Mientras que durante los siglos XVII, XVIII y primeras décadas del XIX eran los coliseos públicos quienes copaban el grueso de los espectáculos sin perjuicio de iniciativas debidas al mecenazgo regio, nobiliario o eclesiástico (lo que no estuvo reñido en ocasiones con la existencia de empresarios que arriesgaban su dinero, aunque siempre en contextos de control de su actividad por las mentadas élites), un poco antes de la mitad del siglo XIX la emergencia y consolidación de la burguesía como principal estamento social provoca una completa mercantilización del espectáculo teatral. Surge así una estructura empresarial dinámica que copará desde entonces el grueso de la cartelera hasta llegar a nuestros días.

Fuentes del teatro musical en Madrid

Desde el punto de vista documental encontraremos una clara diferenciación en la localización de las fuentes generadas por el teatro musical durante estos dos períodos. Así, si la producción músico-teatral dada a la luz durante el antiguo régimen es trazable fundamentalmente a través de las colecciones archivísticas, bibliográficas o museísticas herederas de las instituciones públicas que tuvieron a su cargo los teatros o de los mecenas que pudieran estar detrás de algunas iniciativas artísticas, el corpus documental del teatro musical moderno ha quedado por lo general en manos de aquellas instituciones, empresas y particulares implicadas en la explotación comercial del mismo.

Cubierta de la partitura de la ópera cómica en tres actos  El sueño de una noche de verano  con música de Joaquín Gaztambide y libreto de Patricio de la Escosura basado en el texto francés de Joseph-Bernard Rosier y Adolphe de Leuven, 1852 (© CEDOA-SGAE)
Cubierta de la partitura de la ópera cómica en tres actos El sueño de una noche de verano con música de Joaquín Gaztambide y libreto de Patricio de la Escosura basado en el texto francés de Joseph-Bernard Rosier y Adolphe de Leuven, 1852 (© CEDOA-SGAE)

El grueso de las fuentes de las obras del teatro musical estrenadas en España se reparten entre dos principales instituciones, una depositaria del repertorio del antiguo régimen (circunscrito al principal foco de actividad, Madrid, y en concreto a sus teatros públicos) y la otra del repertorio moderno (explotado comercialmente en todo el territorio español e hispanoparlante desde mediados del siglo XIX). Nos referimos en el primer caso al Ayuntamiento de Madrid, que a través de su Biblioteca Histórica Municipal (BHM) –y de su Archivo de Villa– es heredero de los fondos documentales de los coliseos públicos que de dicha administración dependían. En el segundo caso aludimos a la Sociedad General de Autores y Editores (SGAE) que en su Centro de Documentación y Archivo (CEDOA) atesora el repertorio músico-teatral producido por los socios de la entidad –repertorio que se encargó de administrar desde su creación en 1899, bajo el nombre de Sociedad de Autores Españoles (SAE)– así como los fondos editoriales de los archivos comerciales que explotaron el repertorio lírico estrenado durante la segunda mitad del siglo XIX y que acabaron siendo comprados por la propia SAE poco después de su nacimiento.

En estas dos colecciones excepcionales –parejas en la naturaleza y trascendencia de sus fondos– las dos principales tipologías documentales presentes son los materiales orquestales y los libretos (o apuntes) teatrales, imprescindibles para hacer posible una recuperación escénica del repertorio lírico hispano. En ambos fondos se conserva además un abundante número de partituras orquestales (en general empleadas para copiar a partir de ellas las particellas). En el caso de la colección de la primera biblioteca municipal madrileña la documentación procede de los fondos de los archivos de los propios teatros públicos (el del Príncipe, el de la Cruz y el de los Caños del Peral) mientras que para el caso del archivo de la SGAE, el conjunto documental se destinaba a su explotación por parte de la entidad en régimen de alquiler, de manera que los materiales orquestales y libretos que lo integran recorrieron los fosos orquestales de toda España y fueron llevados consigo por las compañías líricas que giraron por la América de habla española y por otras zonas de influencia hispana.

Los números que definen a ambas colecciones justifican nuestra apreciación de su relevancia. Si la colección de la BHM supera las cinco mil obras con fuentes musicales (incluyendo zarzuelas, sainetes, tonadillas, bailes, óperas, entremeses, etc.) el CEDOA de la SGAE cuenta con un volumen cercano a los diez mil títulos (repartidos entre zarzuelas, sainetes, operetas, óperas, revistas, etc.). Entre estos dos fondos se concentra más de la mitad de los cerca de veinticinco mil títulos del teatro musical español estrenados a lo largo de la historia según estimación de Luis Iglesias de Souza en su monumental publicación El teatro lírico español (que hay que precisar que no censa las obras con libreto en italiano); del grueso de la otra mitad es probable que no se conserven fuentes musicales y de una porción muy considerable ningún tipo de fuente. Aun así existen otras muchas colecciones patrimoniales que complementan parcelas ausentes en estos dos grandes fondos y de las que a continuación vamos a destacar las más significativas.

Otras fuentes

Para el caso del repertorio del antiguo régimen, teniendo en cuenta que la colección conservada en la BHM está circunscrita al ámbito de los teatros públicos de la villa de Madrid –que no fueron el único foco de creación, pues la corte contó con sus propios y relevantes espacios– hay una compleja casuística en la localización de fuentes. De singular importancia son los fondos vinculados a la corona, en general conservados por el Patrimonio Nacional (y fundamentalmente presentes en el Archivo General y en la Biblioteca del Palacio Real de Madrid así como en el Monasterio de El Escorial), aunque a veces por otras instituciones (como ocurre con la colección de tonadillas y de óperas donada por Amadeo de Saboya al Real Conservatorio Superior de Música de Madrid, en cuya biblioteca se conserva). Otro importante conjunto tonadillesco mandado copiar por Barbieri en el siglo XIX se conserva en la Biblioteca Nacional de España (BNE) formando parte de su rico legado.

La BNE y la Biblioteca de Catalunya (BC) custodian importantísimas colecciones de teatro barroco español con abundantes fuentes dramáticas y más escasas pero muy relevantes fuentes musicales. El Centre de Documentació i Museu de les Arts Escèniques del Institut del Teatre (en Barcelona) y varias bibliotecas universitarias de todo el estado poseen adicionalmente relevantes colecciones de teatro aúreo español. En los archivos de diversas casas nobiliarias y de varias diócesis eclesiásticas figura asimismo repertorio músico-teatral vinculado a su mecenazgo o a sus prácticas artísticas y en ocasiones conformado por arias sueltas que testimonian la difusión y pervivencia de las músicas y sus cantables más allá de los límites del espacio teatral. No nos podemos olvidar por último de la presencia de fuentes musicales y literarias antiguas fuera de España, en general en territorios europeos con los que se establecieron estrechísimos lazos políticos y culturales (como Italia, Austria o Portugal) o en las principales urbes de la América de habla española; también se pueden rastrear fuentes en instituciones de la memoria anglosajonas llegadas allí como resultado de una larga tradición de coleccionismo bibliófilo.

Cubierta de una particella del boceto lírico-dramático de costumbres alicantinas en un acto  Doloretes  con música de Amadeu Vives y Manuel Quislant y libreto de Carlos Arniches, c. 1901 (© CEDOA-SGAE)
Cubierta de una particella del boceto lírico-dramático de costumbres alicantinas en un acto Doloretes con música de Amadeu Vives y Manuel Quislant y libreto de Carlos Arniches, c. 1901 (© CEDOA-SGAE)

Para el caso de la creación moderna generada casi exclusivamente en circuitos comerciales, lo que no se custodia en la SGAE es más excepcional y responde no tanto a una dispersión de fuentes como a unas dinámicas propias vinculadas a ciertas tipologías documentales. Por un lado existe un amplio conjunto de fuentes manuscritas originales de los compositores o dramaturgos bien en manos de sus descendientes y/o herederos, bien en las de instituciones en las se han depositado de manera aislada o conformando conjuntos. Aunque hay una larga nómina de bibliotecas y archivos que reúnen fondos personales de estas características destacan por su especialización en ellos la BC, la BNE, el Centro de Documentación Musical de Andalucía, la Biblioteca de la Fundación Juan March, el Museo Nacional del Teatro, el Archivo Vasco de la Música (ERESBIL) y el propio CEDOA de la SGAE. Estas mismas instituciones y otras muchas conservan asimismo fuentes musicales o literarias de las obras en sus colecciones generales.

Otras tipologías de fuentes musicales del teatro musical moderno son las ediciones de reducciones para canto-piano –trascendentales en la difusión del repertorio en la era pre-fonográfica– y los arreglos para distintos grupos instrumentales –vehículo de difusión de las músicas de la escena en otros ámbitos tanto públicos como privados–. Las regulaciones en materia de depósito legal y de defensa de la propiedad intelectual favorecieron que tanto la BNE como el conservatorio madrileño hayan reunido dos voluminosas colecciones de ediciones musicales de teatro musical, a las que hay que sumar fondos en numerosas bibliotecas de todo el país. Por su parte los textos teatrales modernos editados están también amplísimamente representados en las principales bibliotecas.

Pero la aproximación documental a la creación del teatro musical en España no puede reducirse a la localización de las músicas y libros de las obras estrenadas, entre otras cosas porque no siempre estas fuentes han llegado hasta nosotros. El repertorio antiguo de hecho ha tenido dificultades de pervivencia material por el propio carácter las más de las veces coyuntural de sus estrenos y puestas en escena; la pérdida de vigencia de las obras hacía que la conservación de sus fuentes no fuera una preocupación. En época moderna este hecho es menos notable pero no deja de observarse (quedando por ejemplo patente en el reaprovechamiento posterior de materiales de obras que no gozaron de éxito, algo no siempre trazable con facilidad). Más allá de esta razón práctica, fijar nuestra atención en otras fuentes documentales relacionadas con los autores o con el resto de agentes vinculados a la creación (intérpretes, empresarios, teatros, editoriales, censura teatral) permite multiplicar las perspectivas desde las que abordar el estudio de una realidad compleja como es el teatro musical.

Así archivos administrativos, epistolares o diplomáticos, especialmente bien barridos en lo que al repertorio antiguo se refiere, son auténticos tesoros donde la musicología y la teatrología han hallado multitud de piezas con las que ir reconstruyendo el complejo puzle de la historia del teatro musical español. Los fondos personales o institucionales que empiezan a proliferar en muchos archivos o bibliotecas nos permiten asimismo una aproximación a tipologías documentales tan variadas como borradores de música o texto, correspondencia entre autores, intérpretes, creadores plásticos y empresarios, fotografías, figurines, bosquejos escenográficos y grabaciones video o fonográficas de los espectáculos, reseñas críticas de estrenos o reposiciones, programas de mano, folletos de argumento y cantables y cartelería, documentación administrativa generada por la producción músico-teatral, etc., etc. Para el acceso a este tipo de fuentes a las clásicas instituciones archivísticas y museísticas o a las principales bibliotecas generalistas o especializadas mencionadas más arriba hay que sumar modernos centros de documentación como los gestionados estatalmente por el Instituto Nacional de las Artes Escénicas y la Música (Centro de Documentación Teatral y Centro de Documentación de Música y Danza, ambos con sede en Madrid) o sus homólogos de algunas comunidades autónomas, que ofrecen ricas colecciones y valiosos instrumentos de búsqueda.

Nos resta para completar este bosquejo de las fuentes del teatro musical en España aludir a las de naturaleza bibliográfica tanto las publicaciones periódicas como las monografías. En el primer caso recogen desde carteleras a críticas, pasando por autocríticas, crónicas o entrevistas. En el segundo podemos encontrar en ellas estudios, biografías, ediciones críticas o meros anecdotarios sobre el teatro musical. Las hemerotecas (hoy en día muchas de ellas accesibles en línea) y las bibliotecas (también en muchos casos virtuales) cubren el acceso a esos otros testimonios documentales con los que acercarnos a ese gran legado de la cultura española que es el teatro musical.

Bibliografía

  • Mapa del patrimonio musical en España. Madrid, Centro de Documentación de Música y Danza, 2016. [recurso en línea, último acceso: 4 de febrero de 2017]
  • IGLESIAS DE SOUZA, Luis: El teatro lírico español. La Coruña, Diputación Provincial, 1991-1996. (4 volúmenes).
  • JASSA HARO, Ignacio: "El patrimonio documental zarzuelístico: Una aproximación a los fondos y a las instituciones que los custodian", en Alberto GONZÁLEZ LAPUENTE y Alberto HONRADO PINILLA (eds.): Horizontes de la zarzuela. Cuenca, Fundación Jacinto e Inocencio Guerrero, 2014, pp. 61-90.
  • MUÑOZ CÁLIZ Berta: Fuentes y recursos para el estudio del teatro español. Madrid, Centro de Documentación Teatral, 2011-2012.
    [I: Mapa de la documentación teatral en España (.PDF - 2 MB)].
    [II: Guía de obras de referencia y consulta (.PDF - 2,7 MB)]
    [último acceso: 4 de febrero de 2017]

Ignacio Jassa Haro Centro de Documentación y Archivo-SGAE

Todos los ensayos

  1. Un paseo por la historia del teatro musical en España

    Teatro de la Zarzuela en blanco y negro

    Una visión panorámica de la genealogía y evolución de los diversos géneros de teatro musical en España.

    Javier Huerta Calvo
  2. En los orígenes del teatro musical

    Fragmento de la ilustración Quem-quaeritis-Tropus

    En la Edad Media, vinculados a la liturgia, aparecieron los primeros ejemplos de teatro musical.

    Alicia Lázaro
  3. La edad de oro del género chico

    Fragmento La Gran Vía

    Las últimas décadas del siglo XIX vieron florecer el género chico, del que son emblemas La Gran Vía o La verbena de la Paloma.

    Fernando Doménech Rico
  4. La ópera española de vanguardia

    Selene

    Desde los años sesenta, la vanguardia musical comienza a experimentar con el teatro musical.

    Jorge Fernández Guerra
  5. Una saga de grandes libretistas: los Fernández-Shaw

    Guillermo y Carlos Fernandez Shaw

    La Revoltosa, Luisa Fernanda o La vida breve deben sus libretos a Carlos Fernández Shaw y a sus hijos, Guillermo y Rafael.

    José Prieto Marugán
  6. El entremés cantado o baile dramático

    Jocoseria

    El entremés cantado es un género del Siglo de Oro con personajes populares que alterna partes cantadas y recitadas.

    Abraham Madroñal
  7. El melólogo y otras formas dieciochescas

    Partichela original del primer violín del melólogo paródico

    El melodrama o melólogo, que aunaba música y declamación, triunfó a finales del XVIII gracias a autores como Tomás de Iriarte.

    Virginia Gutiérrez Marañón
  8. El público del teatro musical: del Liceo a la Zarzuela

    Ilustración del Teatro Apolo

    El éxito del género chico se debe a un cambio en los hábitos de consumo del público madrileño.

    Pilar Espín Templado
  9. Orígenes de la zarzuela

    Los celos. Mercurio y Argos

    La segunda mitad del siglo XVII vio nacer la zarzuela, que tenía entonces argumentos mitológicos.

    Álvaro Torrente
  10. La tonadilla escénica

    La Tirana

    La tonadilla escénica triunfará en la segunda mitad del siglo XVIII, se hibridará con la ópera italiana y recibirá críticas ilustradas.

    Alberto Romero Ferrer
  11. El teatro musical como espectáculo

    Primero y Segundo

    El frágil equilibrio entre escenografía, música y texto ha originado distintas visiones a lo largo de la historia.

    Ignacio García
  12. Los bufos en España

    Los sobrinos del capitán Grant

    El actor Francisco Arderíus y sus Bufos Madrileños promovieron el repertorio de Offenbach, que revolucionó el teatro musical.

    Serge Salaün
  13. Barbieri o la lucha por una lírica nacional

    Retrato de Barbieri

    Compositor, director, musicólogo y empresario, Barbieri es sin duda la figura más importante del teatro musical en la España del XIX.

    Emilio Casares Rodicio
  14. La ópera flamenca

    Cansinos Assens

    La ópera flamenca vivió su apogeo entre 1924 y 1934, además de abriendo el género a un amplio público.

    Francisco Gutiérrez Carbajo
  15. El teatro frívolo: las variedades y la revista

    Teatro frívolo

    Tramas desenfadadas, músicas ligeras, escenografías atractivas y guiños eróticos hicieron triunfar estos géneros.

    Eduardo Huertas
  16. Hacia una ópera española: de Pedrell a Albéniz

    La creación de una "ópera nacional" centró los esfuerzos de Bretón o Pedrell, pero también de Albéniz o Granados.

    Víctor Sánchez
  17. Entre tradición y vanguardia: El retablo de Maese Pedro, de Manuel de Falla

    Representación de El retablo de Maese Pedro en el Teatre Liceu de Barcelona

    Obra para teatro de títeres basada en un episodio de la segunda parte de El Quijote, e instrumentada para orquesta de cámara y cantantes

    Carol Hess
  18. Ramón de la Cruz y la zarzuela en el siglo XVIII

    Gregorio Ferro (dibujo) y Manuel Salvador Carmona (grabado), "Música y Poesía", grabado para La música de Tomás de Iriarte, 1779

    Creador de la zarzuela moderna, fue uno de los autores más exitosos de la segunda mitad del siglo

    Joaquín Álvarez Barrientos
  19. El musical del siglo XXI

    "El rey león" (2011). Teatro Lope de Vega, Madrid

    De ser un género "menor", ha pasado a ser una reconocida manifestación artística y comercial

    Alejandro Postigo
  20. Farinelli en España

    La gestión de Farinelli puso el teatro musical en España a un nivel hasta entonces desconocido

    José María Domínguez
  21. La zarzuela en la América Hispana

    La calurosa acogida de la zarzuela en América se debió al fuerte vínculo cultural con España.

    Mª de los Ángeles Chapa Bezanilla
  22. El teatro musical después de Calderón

    El teatro musical mantuvo la grandeza y boato del género tras la muerte de Calderón.

    Julio Vélez Sainz
  23. El empeño de lo breve: Teatro Musical de Cámara

    El teatro breve fue el único capaz de adaptarse a las distintas modas y circunstancias que atravesaron el siglo XX.

    Elena Torres Clemente
  24. Paradojas de la gestión de la ópera

    La singularidad de la ópera consiste en su complejidad formal y, por lo tanto, en su inmensa complejidad potencial de sentido.

    Joan Matabosh
  25. La memoria del teatro musical en España

    Una mirada holística al panorama músico-teatral abarcando en nuestro barrido desde el barroco a nuestros días.

    Ignacio Jassa Haro