Recitales para jóvenes en la Fundación Juan March
El ritmo y la palabra. Guía didáctica para el profesor

Tom Johnson (Colorado, 1939)
Counting duets

Tom Johnson  (Colorado, 1939)

Como su propio nombre indica, Contando a dúo es una obra en la que dos intérpretes cuentan. Y curiosamente, en contra de lo que como músicos pudiéramos creer, no cuentan notas, sino simplemente números.

  • Leed y comentad estas notas previas del autor, en las que reflexiona sobre el acto humano de contar:


Aún en los tiempos de las calculadoras de bolsillo que tanto nos ayudan a contar, seguimos haciéndolo nosotros mismos. Los soldados cuentan la cadencia con la que marchan, en parte para aliviar la fatiga y en parte por el simple placer que proporciona. Los agrónomos cuentan las briznas de hierba en un área de muestra. Los que practican la meditación cuentan las respiraciones o el número de veces que se postran; otros cuentan las oraciones con el rosario. Músicos y bailarines de muchas culturas cuentan también desde mucho tiempo atrás. Muchos de nosotros contamos nuestros pasos al subir escaleras largas, aunque rara vez lo admitamos. Los granjeros cuentan sus ovejas, los astrónomos sus galaxias, el analista nuestros glóbulos rojos y todos contamos el dinero. Y el censo nos cuenta.
Hay muchas formas de contar. A veces lo hacemos con exactitud, pero mientras escribo esto me veo contando vagamente cuántas palabras llevo, para saber el espacio que ocupan, cuántos párrafos, para que no me queden ni muchos ni pocos, y cuántas veces he repetido el verbo “contar” para no repetirme mucho. Podemos contar de dos en dos, hacia atrás y repetir la misma secuencia una y otra vez. Un vendedor ambulante puede contar de una ojeada y casi al mismo tiempo cuántas cajas de sandías tiene y cuántas sandías hay en cada caja. Y por supuesto todo depende de la lengua que se hable, aunque no sean necesarios palabras o números para contar. Sin duda todos hemos descubierto que los dedos son suficientes.
Las implicaciones formales, religiosas, aritméticas, psicológicas, lingüísticas y musicales que conlleva contar han llegado a interesarme en gran medida, y dado mi especial amor por las secuencias y números de cualquier tipo he dirigido mi obra reciente en esta dirección.
Cuento las cuerdas de un salterio, las teclas de un piano, cuento bloques de madera, cuento a dúo, cuento en idiomas diferentes y aún sigo encontrando formas de contar en nuevas obras.
Debe haber incontables maneras de contar. Y ya que lo mencionamos ¿no es la “incontabilidad” otro tema fascinante? ¿O es más o menos lo mismo?
Tom Johnson. Agosto, 1982

Contando a dúo está formada por cinco movimientos en los que las fórmulas de enumeración van variando.  En algunos los números van intercalados entre silencios, en otros se acompañan con palmas... Por indicación del autor se puede usar cualquier idioma, aunque deberá ser el mismo para los dos lectores. Por tanto, el tempo de cada pieza se verá condicionado por la extensión de los nombres de los números en cada idioma: no es lo mismo decir  4 en inglés (four), que en castellano o francés (cuatro, quatre).

  • Hemos seleccionado el nº IV como ejemplo para trabajar en el aula.
Counting
  • El lector A empieza a contar lo más rápido posible, en el idioma elegido. Podéis aprovechar para que algún compañero procedente de otra autonomía o país os enseñe a contar en su idioma materno.
  • Tras unos segundos se le une el lector B: cuenta hacia atrás a mitad de velocidad, coincidiendo sus números con los del lector A.
  • Continúan juntos un momento. Después A se calla, regresando después a mitad de velocidad que B.
  • Se repite este proceso tres veces más, hasta que A calla y la pieza termina con dos secuencias “3  2  1” dichas sólo por B a un tempo muy lento (¡32 veces más lento que al principio!)

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