La figura de Siegfried Fink (1928-2006) ha sido de- cisiva para el mundo de la percusión del siglo xx. Su obra, influida por el jazz, causó en su país un enorme impacto que fue extendiéndose posterior- mente por los cinco continentes.
Su enorme versatilidad para abordar diferentes frentes y conciliarlos en torno a la percusión, le permitió mantener, simultánea e intensamente, diferentes líneas de trabajo: creación, enseñanza, interpretación y publicaciones, fueron las más importantes.
Como compositor nutrió el repertorio de percusión con más de 150 obras, además de música de cámara, ballets, arreglos, música para películas, televisión y publicidad. Se inspiraba a menudo en impresiones de sus muchos viajes alrededor del mundo.
Un importante apartado de su actividad es el que se refiere a la enseñanza, al que dedicó gran parte de su esfuerzo durante toda su vida. Fue mentor de jóvenes estudiantes que ahora son célebres intérpretes. Fue de gran ayuda para los departamentos de percusión al proporcionarles una estructura de funcionamiento que permitía, además de ofrecer una instrucción técnica del instrumento, prestar una atención especial tanto al solo como al ensemble de marimba, vibráfono, batería, timbales, xilófono de concierto, glockenspiel, gongs, tam-tams y percusión latina, brasileña y africana entre otros instrumentos de percusión.
Por añadidura, se preocupó de elaborar métodos para todo tipo de instrumentos de esta familia, libros especializados, entradas de diccionarios, reseñas periodísticas y artículos, así como algunas ediciones de obras de otros compositores, llegando a ser uno de los percusionistas con más publicaciones en su haber.
Como intérprete ofreció alrededor de 500 conciertos, estrenando unas 300 obras. Obtuvo una treintena de importantes premios otorgados por su labor artística y pedagógica. Se ocupó también de la dinamización de concursos, festivales y conciertos, dirección de ensembles y seminarios de percusión entre otras actividades, además de haber realizado una excelente labor a través de la radio y la televisión.
La Trommel-Suite, para caja sola, fue una de sus composiciones pioneras junto con la Darabukka Suite, para darabukka sola -tambor de copa de origen árabe- y Conga Negro, para conga sola, obras en las que Fink explora las posibilidades de estos instrumentos.
La Trommel Suite es un clásico del repertorio para caja solista. Al utilizar diferentes zonas del parche y diferentes tipos de percusiones, logra obtener un variado número de timbres. Consta de diferentes movimientos: 1. Intrada, 2. Toccata, 3. Mista, 4. Cadenza y 5. Marcia. Los movimientos que se escucharán en el concierto serán los dos primeros:
La obra va precedida de unas indicaciones que explican la forma de interpretación, el lugar de la membrana donde se debe tocar, la alternancia con la percusión en el aro, la utilización de los bordones y el tipo de baquetas para cada fragmento o sección, ya sea baqueta tradicional de grano, escobilla o baqueta de fieltro, entre otros aspectos, como puede verse a continuación:
Introducción de S. Fink a Trommel Suite que muestra las indicaciones del autor
El esfuerzo de Fink por estandarizar la notación de la percusión puede observarse también en obras como Tabulatur 72 y Tabulatur 2000, en las que establece una nueva comunicación entre el compositor y el intérprete. Además, Fink familiariza sistemáticamente a los lectores con marcas y distintivos, incluyendo una métrica de cambios, patrones de acentuación, anotaciones y diferentes tipos de notación para los trinos junto a la explicación de su significado. Este vocabulario de notación se ha impuesto ya entre muchos editores y compositores que usan estos pictogramas en sus ediciones.
Trommel Suite
https://www.youtube.com/watch?v=4iWEWszDMrU/
Los Estudios para caja en seis volúmenes es uno de los más populares métodos para este instrumento en Europa. En la Suite for Solo Snare Drum, Fink fue el primer compositor en hacer uso de 17 timbres diferentes y colocarlos en un universo musical adecuado.
El ritmo es el elemento de la música más básico e independiente. Subsiste por sí solo y supone la expresión más primitiva de la música. Se puede hacer ritmo con instrumentos musicales, pero también con el cuerpo, con objetos y, por supuesto, con el movimiento, las imágenes y el gesto.
La secuencia de imágenes de una película presenta un ritmo que se refuerza generalmente con la música.
Actividad 01
En «La hora feliz» , secuencia de la barbería de la película El Gran Dictador de Charles Chaplin, la Rapsodia Húngara nº 5 de Brahms determina, en tono de humor, el ritmo de la escena, los gestos y los movimientos del personaje:
https://www.youtube.com/watch?v=ugRSNCUk2pM/
Actividad 02
En los tiempos del cine mudo, las películas se proyectaban siempre con un fondo musical que interpretaba generalmente un pianista, con el fin de acompañar las escenas. Esto se hacía para ilustrar las imágenes e intensificar las emociones del espectador, pero también para mitigar el ruido del proyector. Los pianistas improvisaban la música a partir de recursos básicos tales como gallop para las persecuciones, acordes suaves para las escenas románticas, o bien subrayando con sus intervenciones diferentes situaciones o emociones: terror, secuencias cómicas o dramáticas. En el siguiente video puede verse cómo se hacía antiguamente el acompañamiento en vivo de una película: el pianista se sienta frente a la pantalla y va siguiendo la imagen a la vez que toca (fragmento final de Intolerancia de Griffith, 1916).
https://www.youtube.com/watch?v=1yebAeE1js4/
Actividad 03
A partir de la invención del cine sonoro, la grabación de la música sobre la cinta de la película permite acompañar la imagen estableciendo el clima más adecuado para cada escena. De esta manera, se han añadido bandas sonoras a películas mudas, como es el caso del siguiente ejemplo, La Sinfonía de la ciudad, dirigida por Walter Ruttman. Una película excelente de 1927 que recoge escenas de la ciudad de Berlín y a la que se han puesto diferentes bandas sonoras. En la versión que vas a ver, la música de Timothy Brock ilustra las imágenes de la película:
https://www.youtube.com/watch?v=LdFasmBJYFg
Actividad 04
Fundamos música y gesto con la música de Siegfried Fink. La pieza Toccata perteneciente a la Trommel Suite de este compositor, que se va a tocar en el concierto, presenta el siguiente comienzo:
Observa la partitura y busca la fórmula rítmica que se repite en este fragmento. Una vez que la hayas localizado, indica cuántas veces se repite. ¿Qué otros motivos rítmicos hay? ¿Existe alguna relación entre ellos?.
Actividad 05
Volvamos a la primera fórmula rítmica, el primer compás: trata de interpretarlo con instrumentos corporales. Busca sonoridades diferentes del cuerpo (palmas, palmas en piernas o en el pecho, pitos, pies, cara, etc.).
Combina ahora el gesto con este motivo rítmico: imagina un gesto que puedas realizar de manera precisa en un compás de 4/4 y altérnalo con el motivo principal en sustitución de los compases pares. Puedes usar todo el cuerpo. Si lo hacéis en grupo tendréis que conseguir un buen ajuste y una gran precisión rítmica. También podéis desdoblar el grupo en dos y mientras unos hacen la fórmula del primer compás, otros pueden interpretar los gestos o movimientos.
Actividad 06
De todos los instrumentos pueden obtenerse una infinidad de sonoridades diferentes. Realiza el siguiente ejercicio con un pandero o un xilófono: trata de buscar timbres no tradicionales en estos instrumentos probando con diferentes baquetas, con la mano, toca en lugares distintos del parche o la lámina, usa el mango de la baqueta, explora los bordes del parche y el aro, arrastra la palma sobre la membrana, prueba redobles en el bastidor del pandero o en la caja del xilófono y todo lo que se te ocurra.
¿Cuántos timbres has logrado obtener? ¿Puedes construir una melodía de timbres con las sonoridades obtenidas? Trata de poner un orden en ellas y organizarlas sucesivamente como si se tratara de una melodía construida con notas de la escala.